Se fue Soso, Defensa víctima de su propio “modelo”

Es una bomba para todos los hinchas de Defensa y Justicia, Mariano Soso dejó de ser el DT del equipo. Después de haber sido muy criticado durante la primera parte de la temporada y contar con el apoyo de la directiva del club para su continuidad, decidió marcharse. El motivo es lógico: a pocos días de la vuelta del campeonato y con la Libertadores por delante, buena parte del plantel titular se fue. Estos son: Torito Rodríguez (San Lorenzo), Julio Gonzalez (Necaxa), Nico Fernandez (San Lorenzo), Rafael Delgado (Colon), Alexis Castro (fin del préstamo). Además hay que sumarle la lesión grave del colombiano Loaiza.

 

Se dice mucho sobre este hecho. Algunos se preguntan sobre la motivación de los jugadores que decidieron o pidieron irse a pesar de tener la perspectiva de jugar la Libertadores. Otros entienden la decisión del DT y apuntan a la responsabilidad de la dirección del club. La realidad es que hubo una combinación de cosas, pero que el principal motivo de esta situación es el modelo mismo adoptado por el club en el marco de un futbol argentino muy desigual en cuanto a lo económico.

Defensa y Justicia es un club que no tiene los recursos económicos y la posibilidad de pagar altos salarios sin poner en riesgo sus finanzas como otros clubes más importantes. Es en ese sentido que la dirigencia apostó por un modelo austero en lo futbolístico y en lo institucional, que consiste en adquirir principalmente jugadores a préstamo, con sueldos relativamente bajos, lo que expone al club al riesgo de ver el equipo desarmado en cada mercado de pases (que ahora son dos por año). Es en gran parte esto que imposibilita retener jugadores: mejores ofertas económicas de otro club, en ciertas circunstancias, hacen imposible retener jugadores. Sin embargo, desde este espacio venimos diciendo que se debería abrir el debato con hinchas y socios para pensar un modelo por lo menos más combinado y menos dependiente de préstamos pero también de la empresa de Cristian Bragarnik en cuanto a jugadores y DTs.

En ese sentido, ¿no se le podría dar más espacio a los juveniles en vez de traer jugadores que pasan sin pena ni gloria (Herrera)? Ante la “fuga” de delanteros ¿no había espacio para el joven goleador Juan Miritelo? En los últimos años, ¿qué revelaciones juveniles salieron del club más allá de algunos nombres importantes en los puestos de ataque? Y esto lo preguntamos sabiendo que los juveniles vienen haciendo buenos torneos como recientemente la cuarta división.

Si se deja que fluyan libremente las leyes “naturales” del mercado, Defensa y Justicia no podrá escapar de este círculo vicioso y tarde o temprano lo pagará. El Halcón necesita un cambio en cuanto a la idea colectiva que implique la participación activa de hinchas, socios, empleados, directivos pero también jugadores y DTs. Lo que no se consigue con el dinero tal vez se podría conseguir con un proyecto de club diferente, ambicioso, y sobre todo político. Un club verdaderamente social, abierto a las clases populares de Varela, en donde haya implicación desde abajo, con eje en la continuidad y en el largo plazo. Hoy Defensa tiene planes a largo plazo pero construidos con planes a corto plazo. De ahí viene el desfasaje. Lo cierto es que por el momento, venga quien venga (e incluso si Soso se quedaba) va a haber mucho trabajo para rearmar un equipo competitivo.