Philippe Alcoy
Desde la eliminación de ayer de River en la Copa Libertadores el periodismo deportivo argentino, y las redes, se inundaron de comentarios sobre lo dispar de las ligas argentinas y brasileñas, sobre todo en términos económicos, lo que le permite a algunos clubes brasileños contratar figuras increíbles para la realidad latinoamericana. Antes que nada decir que esto es futbol y afortunadamente no siempre los grandes presupuestos ganan. Sino como explicamos que Defensa y Justicia le gano una final, en Brasil, al poderoso Palmeiras, con gran plantel. Voy a hacer solo un comentario parcial ya que sigo ambos torneos, aunque puede contener alguna imprecisión:
- Es un error hablar del futbol brasileño solo viendo la realidad de clubes como Flamengo o Palmeiras. En ese país existe una cantidad importante de clubes ultra endeudados y casi fundidos en las principales divisiones (A y B). Justamente la competencia con esos clubes millonarios hace que para muchos clubes la única opción que queda es el endeudamiento.
- La organización de la liga argentina es una verdadera vergüenza, pero ¿realmente piensan que en Brasil hay una “organización a la europea”? Es un desastre. Los clubes se arman y desarman en pleno campeonato (como está sucediendo en Argentina). Los clubes brasileños tienen una agenda totalmente apretada jugando prácticamente todo el año cada 3 días, lo que favorece a los clubes poderosos del sur y sudeste del país.
- Es verdad que Brasil cuenta no con 5 grandes como en Argentina, sino con por lo menos 12-15 equipos "grandes", con millones de hinchas. Esto obliga a la prensa a ser un poquitito más equilibrada. Lo que en Argentina es una vergüenza ya que el periodismo deportivo solo habla de River y Boca, y muy poco incluso de los otros "grandes". Ni mencionemos la cobertura a los denominados "chicos".
- Siguiendo sobre la cuestión de la organización de los torneos y los "grandes": en Brasil no hay promedios. Esto hace que hoy en día en la segunda división estén gigantes como el Botafogo, el Vasco da Gama y el Cruzeiro. Ninguno de estos clubes está luchando por el ascenso en este momento y Cruzeiro está luchando por no descender a la tercera división (el club está casi fundido). En la serie A, Gremio y São Paulo pelean por mantener la categoría, por más que aun falte mucho. En Argentina prevalece lamentablemente el sistema ridículo de los promedios. ¿Esto significa que en Brasil hay menos corrupción? No. A fines de los 90 hubo una reorganización del futbol nacional que le permitió al Fluminense que estaba en la 3ra división subir directamente a la primera por pura decisión burocrática.
- La estructura de torneos y clubes en Argentina y Brasil no tiene comparación. En Argentina la organización del futbol está hecha para favorecer a los clubes de Buenos Aires y el conurbano. Un club de barrio de Capital tiene el mismo o incluso más peso que grandes clubes provinciales. Una vergüenza. Es una cuestión importante reconfigurar todo el futbol argentino para sacarle peso a Buenos Aires y permitir una representatividad más importante para los equipos de otras provincias con miles de hinchas. En Brasil existe una estructura nacional y estadual, lo que hace muy difícil que ciertos clubes lleguen a las máximas categorías. Sin embargo, acá también se favorecen a los clubes de los Estados más ricos (sur y sudeste) contra los más pobres (nordeste y norte, esta ultima región no tiene ningún representante en la principal categoría).
Me parece que estos elementos tendrían que entrar en la discusión cuando se hacen comparaciones un poco superficiales entre ambas realidades. El futbol argentino va a seguir siendo uno de los mejores y más competitivos de América y del mundo. Y el futbol brasileño no es tan ideal como algunos empiezan a decir. Lo que si habría que discutir de fondo es la estructuración de los torneos, la cobertura mediática y el peso indecente que se le da a Buenos Aires con respecto al resto del país.
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