8.3.18

El Halcón elimina estruendosamente al América en Cali


Un año después de haber eliminado al São Paulo en Brasil, Defensa y Justicia logra otra hazaña internacional, esta vez en Colombia contra el América de Cali. Fue 3 a 0 para el humilde club de Florencio Varela.
Philippe Alcoy

“Catástrofe”, “crisis total”, “pesadilla” son algunos de los títulos de la prensa colombiana. El histórico América de Cali, que regresaba a una competencia internacional luego de casi diez años, enfrentaba por el partido de vuelta de la primera ronda de la Copa Sudamericana al “desconocido” Defensa y Justicia.

Todo estaba listo para una “fiesta escarlata”. En el partido de ida en Florencio Varela el equipo colombiano se había impuesto (injustamente) por 1 a 0. Las casi 20.000 personas que vinieron a ver a su equipo al Pascual Guerrero esperaban que estas circunstancias y el peso histórico del América bastasen para superar al humilde Halcón de Varela.

Del lado de Defensa y Justicia, a pesar de la derrota en el primer partido, tanto los jugadores como el cuerpo técnico, y más aun la hinchada, no perdían esperanzas en dar vuelta la situación. El equipo venía repuntando en el torneo local, en el primer partido el América se impuso injustamente y venía mal en el torneo colombiano. Pero lo que más daba esperanzas a la hinchada varelense era el recuerdo de la mítica eliminación del São Paulo el año pasado también por la Copa Sudamericana, una proeza futbolística que marcaba el debut del Halcón en los torneos internacionales.

Así, todo también estaba dado para que el “potrero” vuelva a hacer historia por el continente americano. ¡Y así fue! La historia de un club es importante pero no gana partidos. Y el Halcón fue superior a lo largo de los 180 minutos ante un América de Cali desdibujado y de juego mediocre.

La nueva hazaña de los de Varela comenzaba con un tiro libre impecable, implacable, al ángulo. Golazo. A los 15 minutos de juego “el Cuqui” Márquez se anotaba en el tanteador y empezaba a concretizar el sueño del pequeño grupo de hinchas que viajó a Colombia y de los tantos que lo seguían por la televisión desde Florencio Varela. El partido siguió parejo pero el conjunto colombiano no lograba nada.

En el segundo tiempo un cabezazo asustaba al arco del Halcón pero lo más claro en ataque del América quedaba por ahí. En cuanto a Defensa, lo mejor estaba por venir. A los 24 minutos del ST, el mejor de la cancha, el “Lolo” Miranda recupera la pelota en la mitad de la cancha, avanza y mete un zapatazo desde afuera del área que supera al arquero colombiano y revienta la red. Otro golazo de Defensa que se ponía 2 a 0 y se estaba clasificando. Pura alegría. Silencio en el Pascual Guerrero. El equipo colombiano quedó paralizado y hacia el final del encuentro, la perlita de la cantera del Halcón, Nicolás Fernández, en una jugada repleta de errores defensivos la mete casi con el arco vacío.

3 a 0 para Defensa y Justicia. Primera victoria fuera de Argentina. Goleada histórica. Pocos equipos en la historia le han ganado de este modo al América en su casa. Para la hinchada varelense es un sueño. Esta hinchada que durante tantos años acompañó al equipo a pequeños estadios de las divisiones del ascenso argentino y que soñaba “simplemente” con jugar un día en Primera División. Hoy no solo ve a su club afianzarse en la máxima categoría, sino que el humilde Halcón de Varela disputa torneos internacionales, eliminando a grandes sudamericanos. Hoy, en el torneo local, el Halcón se encuentra disputando incluso un lugar en la próxima Copa Libertadores. Algo que hace solo algunos años era realidad solo en algún videojuego.

Enorme victoria del Halcón de Varela en Colombia. Poco a poco el nombre Defensa y Justicia está empezando a dejar de ser una “rareza”, motivo de alguna burla. Defensa y Justicia empieza a transformarse en sinónimo de dolor de cabeza, de fantasma futbolístico para los “grandes” del continente; y Defensa y Justicia se empieza a pronunciar con acentos diferentes, en lenguas diferentes. Algunas canchas son llamadas “Cementerios de elefantes”, el Halcón se está ganando la fama de “sepulturero de elefantes a domicilio”.



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